viernes, 30 de junio de 2017

Octava del Corpus, 2017


Afammer-Agudo y la celebración de San Benito



Perseverantes en el empeño de recuperar y divulgar el patrimonio local y la cultura tradicional, Afammer-Agudo ha decidido aceptar la propuesta de nuestro párroco para restablecer la celebración de San Benito, patrón de la iglesia parroquial.
En otros tiempos el santo titular de la parroquia fue muy celebrado por nuestros antepasados. No se conocen muchos datos al respecto, pero en el libro cancelario de la Virgen del Rosario se menciona la compra de un toro para las celebraciones a medias con los de San Benito. Salva Jiménez recoge en su blog (38 grados norte; marzo de 2011; cofradías) una orden del Conde de Aranda, datada en 1770, sobre las cofradías, hermandades y otras asociaciones religiosas, que aporta algunos datos sobre San Benito: También hay un voto de villa por el título del Patrono y Señor San Benito en el que por los señores de su Ayuntamiento anualmente se nombra un sugeto con el cargo de Prioste que tiene la obligación en la festividad de dicho Santo de matar un toro como gasto hascenderá a cien escudos o reales poco más o menos, y además hace su convite a los de Ayuntamiento este a su arbitrio. 
Este año la fiesta será bastante más comedida. Se ofrecerá una misa a San Benito el martes, 11 de julio, a las 20:00 horas. A continuación tendrá lugar una  modesta verbena en la puerta de la iglesia parroquial, en un intento de rememorar la celebración antigua (lo del toro no se va a recuperar… de momento).


lunes, 26 de junio de 2017

El Corpus, la Octava y la hermandad Sacramental


         Tras un periodo del que se carece de información, la Hermandad Sacramental fue refundada el 28 de junio de 1609 y, desde entonces, ha mantenido su actividad hasta el momento presente, exceptuando una breve interrupción entre 1865 y 1880. Durante estos cuatro siglos de existencia, la institución ha sufrido numerosas modificaciones en consonancia con el devenir de los tiempos, la mentalidad de autoridades eclesiásticas y la evolución de la propia comunidad que la ha respaldado. En este tiempo ha conocido tres ordenanzas distintas y ha perdido buena parte de los elementos que la definían, pero hasta la fecha ha conseguido sobrevivir a todos los obstáculos con los que se ha encontrado.

Iglesia parroquial de San Benito. Puerta del lado del Evangelio.

sábado, 24 de junio de 2017

Sabores en el recuerdo. Los emparedados de galletas María

La tartera y los platillos son de Cosas, la tienda de Carmen en C/ Zurbano

         A comienzos de la década de los setenta del siglo pasado constituyeron un plato de repostería muy frecuente de cualquier celebración familiar. Las galletas María eran el producto más asequible, después del pan, para acompañar una taza de café con leche o leche sola en los desayunos infantiles. El relleno se adaptaba a los contenidos de la alacena, siendo frecuente la mermelada de tomate, que ahora está tan de moda. El punto de opulencia lo proporcionaba el coco rallado que, debido a su elevado coste, era usado con bastante parquedad.
         Su elaboración es rápida y sencilla, su sabor tiende a mejorar el día después y pueden conservarse varios días en el frigorífico si se ponen en un recipiente cerrado.

Emparedados de galletas María
2 paquetes de galletas María, leche condensada cocida,
1 cucharada de brandy, amaretto, etc.,
café, coco rallado, azúcar
Untar el lado liso de una galleta con leche condensada cocida, cubrir con otra galleta, formando un emparedado. Repetir hasta conseguir la cantidad deseada. Poner en un plato hondo café solo, un poco de azúcar y el licor. Poner coco rallado en otro plato hondo. Pasar los emparedados por el café y rebozar en el coco. Dejar que reposen unas horas antes de consumir para que el café ablande las galletas.

jueves, 22 de junio de 2017

La gastronomía tradicional

         Al tratarse de una población limítrofe y, en otros tiempos, asentada en una zona de paso, la gastronomía local se define por la amalgama de sabores y modos de hacer interregionales. Así, a los típicos asadillos y pistos manchegos, hay que añadir las sopas, embutidos, escabeches y repostería de influencia extremeña.
         La cocina tradicional se caracteriza por la utilización mayoritaria de materias primas locales, una elaboración sencilla y un utillaje poco diversificado. 

Cáscara de naranja, canela y matalahúva son las especias dulces de la repostería tradicional.