El pasado
martes, 12 de julio, tras varias décadas de olvido, se ha vuelto a celebrar la
fiesta del patrón de la localidad, San Benito Abad. El santo, instalado sobre
andas, realizó el recorrido tradicionalmente considerado como media
procesión. Salió y regresó a la iglesia por la puerta de Palacio que, en otros
tiempos, constituyó el acceso principal. En la calle Zurbano se adornaron unas
mesas para que los asistentes besaran la medalla y los porteadores descansaran
unos instantes.
Inmediatamente
después de los actos religiosos Afammer-Agudo preparó una colación en la misma
plaza de la iglesia, a la que asistieron en torno a ochenta personas. Al menú
típico de la asociación (sangría y emparedados) se sumaron los altramuces,
porque se ha considerado que debieron estar presentes en las celebraciones
antiguas (los vecinos de San Juan los repartieron hasta tiempos más o menos
recientes). La fiesta quedó lucida y, sobre todo, recordaba otra época; el
Ayuntamiento puso unas banderitas y prestó las sillas y mesas; quizá lo mejor
de todo fuera el lugar elegido, pues no existe otro rincón en Agudo que pueda lucir juntos dos edificios como
la iglesia parroquial y el ayuntamiento viejo.
